
The Spy Who Came In from the Cold
Nos proponen el visionado de la adaptación de una de las mejores novelas de John Le Carré, en la que el gran Martin Ritt consiguió una de sus mejores películas.
Nos metemos de lleno en el descarnado mundo del espionaje que imperó en Europa en los años de la Guerra fría, con sus métodos despiadados, crueles e inmorales, para acercarnos a una visión del mundo del espionaje bastante desencantada, que excluye cualquier elemento fantasioso. No estamos ante un superespía capaz de lidiar con un montón de enemigos. Nuestro protagonista es un hombre normal y corriente, con sus sueños y sus desgracias personales.
Un contrapunto de los relatos de espías tipo James Bond, en auge entonces, que ofrece una imagen de juego más limpio, lealtad e incorruptibilidad de los agentes occidentales.