Fotograma de la película en la que se ve a un grupo de niños hablando entre si en un entorno de rocas y subidos a un tronco de árbol caído, con sus bicis apoyadas debajo

Tarde para morir joven

Nos trasladamos al verano de 1990, cuando en Chile, un pequeño grupo de familias que vive en una comunidad aislada, trata de aprovechar la libertad emergente tras el final reciente de la dictadura del país.

En base a recuerdos autobiográficos, la directora chilena Dominga Sotomayor, retrata la evolución de un grupo de chicos durante un verano en una comunidad ecológica en las afueras de Santiago de Chile.