
Sin Voz ni Don
Vienen de visitilla unos vallisoletanos que aseguran que se quedan consigo mismos.
En formato de folk rock humorístico y desenfadado, la obra de Sin Voz Ni Don es un canto al hedonismo, al individualismo de la sociedad neoliberalista.
Su primer álbum Me quedo conmigo es un compendio de ocho canciones que narran, de forma más bien satírica, nada indulgente y premeditadamente costumbrista, la experiencia de un individuo sumido en los golpes (más recibidos que dados) del día a día.