Foto de Emily Jane White con un vestido negro y un colgante en forma de rombo gesticulando con energía lánguida en un ambiente de humo rojo.

Emily Jane White

Desde Los Angeles te visita una artista que te trae la más preciosa oscuridad que puedas echarte a la cara.

Emily Jane White ha sabido dotar a sus composiciones de un toque personal y maduro, su folk oscuro arrolla con todo a su paso para convertir nuestros corazones en cenizas.

Con el folk como arma y una voz impresionante, Emily perpetra melodías que nos atrapan y que recuerdan al Nick Cave de Murder Ballads.

Viene presentando su sexto álbum de estudio Immanent Fire, un disco precioso con el clima como principal temática.

En él nos presenta, de forma apocalíptica, un planeta al borde de la destrucción y esa aniquilación lenta e irreversible sin nuestra intervención positiva. Nos muestra el camino hacia el interior de nosotros mismos e intenta demostrar que en nosotros está el cambio y que es posible desterrar estos tiempos depresivos y oscuros.

Canciones espectrales, ligeros toques electrónicos y un sutil toque gótico forjan un sonido que va cociendo a fuego lento, sin prisa, pero con mucha seguridad y un talento.