Foto de Delaossa mirando a cámara y gesticulando con las manos en una pose típica de auténtico rapero.

Delaossa

Desde del barrio malagueño de El Palo nos visita un rapero de los que quedan pocos.

Su música es una propuesta sincera, cargada de contenido y repleta de sentimiento que reclama un hueco en una industria musical y que ya lo tiene en la industria sentimental de mucha gente.

Después de pasar su pubertad y adolescencia bebiendo de Cypress Hill, Tote King o Kase-O y rapeando con sus amigos sobre bases reproducidas en coches maletero abierto y litros en la mano, con sus 27 palos edita su primer álbum: Un perro andaluz.

Pero tiempo antes, con tan solo unos cuanto singles publicados y colándose en listas de tendencias de YouTube, ya se hizo una gira por latinoamérica con su colectivo Space Hammu (aka Los Chicos del Comos).

Delaossa no es otro producto teenager a ritmo de lo que se lleva, es auténtico, escupe historias de su día a día en canciones llenas de rabia donde la angustia, los vicios, la pérdida y la soledad están siempre presentes, pero también la auto-superación, el orgullo, la humildad y el respeto hacia los demás.

En definitiva: rap sincero y humano con mucho flow, para gente normal, de esa que trabaja y vive aquí abajo, en el suelo.